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Haciendo tiempo para el gimnasio

9 de mayo de 2015 / VASA Fitness

He sido un ávido y dedicado asistente al gimnasio durante años. Mi alarma sonó temprano en la mañana y, sin importar lo cansado que me sintiera, salté de la cama y me puse mi ropa de gimnasia. Una lesión/cirugía/recuperación de cadera más tarde y quedé totalmente fuera de mi rutina de gimnasio. La vida está ocupada. Todos tenemos tantas cosas que nos empujan en diferentes direcciones: trabajo, relaciones, niños, pasatiempos, escuela, iglesia, etc. A veces parece que no hay suficientes horas en el día para hacer todo y mucho menos ir al gimnasio. . Por muy ocupados que estemos, la condición física y la salud en general son importantes, entonces, ¿cómo sacamos tiempo para ir al gimnasio?

1. ENCUENTRA TU MOTIVACIÓN

¿Quieres perder algunos kilos o tal vez más? (La forma más sencilla de ver la pérdida de peso es comparar las calorías que entran y las que salen. El ejercicio quema calorías. La quema de calorías ayuda a la proporción de calorías que entran y salen).

¿Quieres desarrollar músculo? El gimnasio es el lugar perfecto para aumentar la fuerza muscular, tonificar o adelgazar. Levantar pesas varias veces a la semana puede marcar una gran diferencia en la fuerza. No dejes que las máquinas de pesas te asusten. La mayoría de las máquinas tienen instrucciones sencillas con imágenes para ayudarte o programar una consulta con un entrenador personal.

¿Estás listo para mejorar tu salud general? El ejercicio no sólo ayuda a perder peso y fortalecer los músculos, sino que también mejora su salud en general. Una rutina de ejercicio regular mejora la salud cardiovascular, así como la salud mental y emocional.

2. ESTABLECE UNA META

Establece tus objetivos en función de tu motivación. ¿Quieres perder 10 libras, hacer peso muerto 50 libras más, mejorar tu presión arterial? Establecer sus objetivos en función de su motivación hará que sea más fácil cumplirlos. Me gusta establecer una meta más grande y submetas más pequeñas para lograr mi meta más grande. Por ejemplo, si quiero perder 20 libras, me propongo perder 2 libras por semana. 2 libras parece mucho más fácil de lograr que 20.

3. HAGA UN PLAN

¿Cuando vas? ¿Mañana? ¿Noche? ¿A qué hora?

¿Por cuánto tiempo se hospeda? ¿30 minutos? ¿60 minutos? Cuando empiezas por primera vez, tener un objetivo de tiempo (cualquiera que sea) es probablemente más importante que la cantidad real de tiempo que estás ahí.

¿Qué haces mientras estás allí? ¿Clase de spinning, cinta de correr, pesas libres, elíptica, zumba? Siga un plan y se sentirá más productivo con su entrenamiento y será más probable que regrese la próxima vez.

4. CONSIGUE UN COMPAÑERO DE GIMNASIO

Es mucho más probable que lo logre si alguien espera que esté allí. Puedo ponerme todas las excusas del mundo, pero ninguna me parece válida si tengo que decírselas a otra persona. No quiero que me conozcan como el copo, así que si esperas que esté en el gimnasio para conocerte, estaré allí.

5. Prémiate

Una vez que empieces a cumplir tus pequeñas metas, celebra. Compra un traje nuevo. Derrocha dinero en esa nueva ropa de gimnasia que tanto deseas o cómprate un bolso nuevo.

Págate a ti mismo. Date una cierta cantidad de dinero por cada pequeño objetivo alcanzado para obtener una recompensa mayor cuando alcances tu gran objetivo. Es más fácil celebrar ese gran gol cuando tienes dinero en efectivo a mano.

Hazte un masaje o una pedicura, o lo que quieras hacer para relajarte. Has estado trabajando duro, así que recompensa esos esfuerzos.

Por más difícil que pueda ser comenzar con una rutina de gimnasio, una vez que lo haces de manera constante, se vuelve cada vez más fácil. Las excusas cesarán y te sentirás mucho mejor.